El
siete de junio serán las elecciones, elegiremos por tres años a quienes
llevaran la rienda de la administración, y ¿qué esperamos?, servicio digno, atención
digna al ciudadano, que se cumpla lo prometido…, son muchas las expectativas
ciudadanas, esperemos que los políticos estén a la altura de sus promesas, de
las necesidades y no sean nuevamente una llamarada de petate en la que tengamos
que conformarnos con lo que se pudo, se inscribieron por que dijeron que podían,
porque sabían cómo; el gasto derrochador de las campañas así lo indica, dinero
no les falta, por aquí y por allá demostraciones de opulencia e influencias;
esperemos que en la silla no se sienten por tres años y que no se les acabe esa
actitud de conquistador frente a nosotros los ciudadanos.
Sin
duda alguna tenemos parte de culpa nosotros los electores, pues hemos caído en
un conformismo político, en donde esperamos con ligereza a que medianamente cumplan
y que no se roben tanto y creo que los tiempos han cambiado, hoy es momento de
votar, por los mejores perfiles, y no por el menos peor, exijamos que tengan
evaluaciones ciudadanas periódicas nuestros representantes y si no cumplen con
las expectativas, podamos correrlos pues al final del día nosotros pagamos sus nóminas
y sus ingresos.
Los
jefes somos los que los elegimos, démosle el poder a quien de verdad lo merece,
no por bonitos o ricos, porque saben y conocen de las necesidades diarias, y
que no le echen la culpa, a los directores, a los policías o a quienes están a
su alrededor, son las cabezas las que deben de organizar bien la estrategia, si
las cosas no se hacen la parte más grande de la culpa es la cabeza, pues carece
de liderazgo, quienes tienen esas características de líder y el temple de que
los demás sigamos sus pasos, merecen ser llamados servidores públicos, y que
los huesos se queden para los perros, ese tiempo del hueso ya se acabó, pues el
político debe dejar de ser un perro detrás del hueso, y les exigimos que hagan
su trabajo con honradez, amor de servicio, paciencia y en el entendido de que
los ciudadanos mandamos, y el cliente siempre tiene la razón, pues es quien
recibe el servicio.
Será
una pelea de cada voto muy interesante, y los colores de la boleta querrán
confundir al elector, seamos inteligentes y vayamos por los que tienen la mejor
propuesta, los que han demostrado que pueden.
El
horno no está para “bollos” y debemos tener la capacidad de reconocer a los
lobos, aunque tengan piel de cordero, recordemos que es por tres años nuestra
decisión, así que por lo que a los votantes respecta seamos responsables de
nuestros actos y afrontemos las consecuencias de ello, pues no se vale quejarse
después si no participamos en el ejercicio del derecho, pero también obligación
de votar, poder al ciudadano y responsabilidad a los servidores corruptos o
negligentes, necesitamos gobiernos de calidad, con profesionales que sepan
resolver los problemas cotidianos, y no expertos en excusas y pretextos, pues
desde que se inventaron los gansitos, se acabaron los p…..ingüinos, es buena la
propuesta de los candidatos, ahora veamos cuales son mágicas, porque esas son
las que son falsas, los proyectos deben ser apegados a la realidad pues así se
pueden cumplir al 100 % de otra manera seguiremos teniendo políticos caninos,
solo tras el hueso, sin forma ni fondo.
Tenemos
la oportunidad de construir una sociedad diferente, con rumbo, y sin carencias.
a estas alturas deberíamos estar en el G8 discutiendo las finanzas mundiales y
no lidiando con la pobreza extrema que de entrada es tan grave como la africana
y eso ya es decir mucho, gracias a dios somos una sociedad que salimos adelante
de cada catástrofe, a base de pundonor, corazón y sobre todo mucho trabajo, a
los mexicanos nunca se nos cierra el mundo, quizá las puertas no se nos abren
tan fácil, pero somos muy persistentes esa es nuestra fuerza, desde la
conquista, nunca nos hemos dado por vencidos y ahí radica nuestra identidad
renegada y especial, donde hasta de la muerte nos burlamos, somos estos los
dobladenses un pueblo de gente que no dejaremos de seguir en pie de lucha, así
que ejercer el poder del voto es la mejor arma en contra de nuestros demonios
caninos.
Por
ultimo estimado lector doy gracias a que preste unos minutos de su valioso
tiempo a este espacio escrito en el que periódicamente estaremos comunicándonos
con su respetable persona, quizá se incomodaran algunos personajes, quizá
toquemos temas incomodos para otros, pero la verdad es que gracias a la
libertad de expresión tenemos la fortuna de buscar su preferencia y por esta ocasión
nadie lo puede remediar.
